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El vino: Beneficios para la salud

 

Cada año, hay una oleada de titulares sobre las propiedades beneficiosas para la salud del vino. Pero, ¿se puede beber vino y realmente haber una diferencia con respecto al no beberlo? La respuesta en este caso es una buena noticia, desde los últimos estudios. Nota: Los beneficios para la salud provienen del consumo moderado de vino, definido por la Asociación Americana del Corazón como de una a dos períodos de cuatro onzas vasos al día.

Promueve la longevidad

Evidencias: los bebedores de vino tienen una tasa de mortalidad 34 por ciento más bajos que los bebedores de cerveza o licores. Fuente: un estudio finlandés de 2.468 hombres durante un período de 29 años, publicados en the Journals of Gerontology, 2007.

Reduce el riesgo de ataques de corazón

Evidencias: los bebedores moderados que sufren de presión arterial alta tienen un 30 por ciento menos probabilidades de tener un ataque al corazón que los no bebedores. Fuente: a 16-year Harvard School of Public Health study of 11,711 men, published in the Annals of Internal Medicine, 2007.

Reduce el riesgo de enfermedades cardíacas

Evidencias: los vinos intos contienen taninos procianidinas, que protegen contra las enfermedades del corazón. Vinos de Cerdeña y el suroeste de Francia tienen más procianidinas que otros vinos. Fuente: estudio de la Universidad Queen Mary de Londres, publicado en la revista Nature, 2006.

Reduce el Riesgo de Diabetes Tipo 2
Evidencias: los bebedores moderados tienen un riesgo 30 por ciento menor que los no bebedores de desarrollar diabetes tipo 2. Fuente: Investigación sobre 369.862 individuos estudiados durante una media de 12 años cada uno, en Amsterdam VU University Medical Center, publicado en Diabetes Care, 2005.

Reduce el Riesgo de accidente cerebrovascular
Evidencia: La posibilidad de sufrir un coágulo de sangre relacionados con accidente cerebrovascular disminuye alrededor de 50 por ciento en las personas que consumen cantidades moderadas de alcohol. Fuente: estudio de la Universidad de Columbia de 3.176 personas durante un período de ocho años, publicado en Stroke, 2006.

Disminuye el riesgo de cataratas

Evidencias: los bebedores moderados son el 32 por ciento menos propensos a tener cataratas que los no bebedores, los que consumen vino tienen un 43 por ciento menos probabilidades de desarrollar cataratas que los que beben sobre todo cerveza. Fuente: estudio de 1.379 personas en Islandia, publicados en la revista Nature, 2003.

Disminuye el riesgo de cáncer de colon

Evidencia: El consumo moderado de vino (especialmente el tinto) reduce el riesgo de cáncer de colon en un 45 por ciento. Fuente: un estudio de la Universidad Stony Brook de 2.291 personas durante un período de cuatro años, publicado en el American Journal of Gastroenterology, 2005.

Desacelera el deterioro cerebral

Evidencia: La función cerebral disminuye a un ritmo notablemente más rápido en los no bebedores que en los bebedores moderados. Fuente: Universidad de Columbia estudio de 1.416 personas, publicado en Neuroepidemiología de 2006.